jueves, 20 de mayo de 2021

Veinte de mayo de 2021.

Agotamiento que no cesa.
Calor inesperado (o igual no tanto: el verano en Madrid comienza en cuanto llega San Isidro).
Tormenta (también esperada: aquella calma chicha) que ha arrasado parcialmente mi entorno laboral.
Alergia. Mucho peor que los últimos dos o tres años, a pesar de la mascarilla.
Intento buscar un punto de apoyo. No, mejor un punto de anclaje. Algo que evite que me desplome. 
Porque no sé cuanto tiempo más voy a ser capaz de aguantar. 
Ni si vale la pena seguir esforzándome por hacerlo.

Veinte de mayo. Poco más que contar.

No hay comentarios: