Queridos Reyes Magos,
Sí, este año también escribo mi casi tradicional 'Carta de Reyes'. Porque, aunque cada vez escriba menos por aquí y hasta en esto de escribir esta carta haya esperado a ultimísima hora…no podía dejar de hacerlo.
Quizá por mera superstición.
Queridos Reyes Magos,
Creo que este año he vuelto a ser bastante buena. He cumplido con mis obligaciones, no he faltado al trabajo, sigo siendo educada, respetuosa y paciente. Procuro no enfadarme (y, si me enfado, no pagarlo con otros y/o que no se me note). También he procurado tener mi entorno doméstico limpio y, hasta donde me permite el tiempo, ordenado. Cuido mis plantas, lanzo trocitos de pan a los pajaritos del jardín. O sea: que he sido todo lo buena que he podido. Y por eso me atrevo a escribiros esta carta.
En realidad, este año lo hago para daros las gracias. Mi principal deseo hace un año justo era que me renovasen el alquiler y a un precio razonable. Y os lo pedí…y me lo concedísteis. O intercedísteis (con otras fuerzas y otras energías) para que así fuese. Así que: infinitas gracias.
También he mantenido el trabajo. El sueldo es de mera supervivencia…pero al menos ya vuelvo a tener cotizado lo bastante como para que, si me despiden, tener nuevamente derecho a unas semanas de subsidio hasta encontrar otra cosa. No es, para nada, el trabajo de mi vida. Pero es lo que hay. Y como en el caso de mi deseo de renovación del alquiler, mi agradecimiento hacia vosotros en lo que vuestra magia haya podido influir.
Y para este año…, pues pocos deseos.
Si acaso, que me ayudéis a encontrar un trabajo con mejor horario, un sueldo más alto y en algo que me ilusione. Estoy entrando en una edad en que va a tener que importarme mucho la base de cotización con vistas a la jubilación. Eso y tener un sueldo que me permita ahorrar algo. Por tanto y a riesgo de resultar tremendamente materialista: os pido que me ayudéis a ganar más dinero en el trabajo (ya sabéis que a mí nunca me asustó trabajar).
Os pido también salud. Y me gustaría no estar, de forma continua, tan cansada. Imagino que para eso también deberé poner de mi parte..
Otro deseo es que no se me rompan más cosas, que termine cuanto antes la obra de la fachada del edificio (porque mis plantas no llevan bien el confinamiento, como no lo llevé yo en su día), no pasar por otro proceso de avería doméstica como el de hace unos meses.
Poco más. La verdad es que no quiero cosas materiales. Me gustaría una nueva cámara de fotos, sobre todo para recuperar las ganas de hacer fotografías. Pero es algo que no puedo pretender tener mañana mismo (ninguna de las dos cosas) así que lo dejaré para que surja a lo largo del año.
Mañana fingiré sorprenderme con los pendientes de metal, el anillo 'nudo de brujas' y el ejemplar de 'El retrato de Dorian Gray' con ilustraciones de B.Lacombe que encontraré junto a mi botín de piel roja.
Y… Y no sé si agradeceros el que este año abriera del todo los ojos y viera tan claramente todas las mentiras, los engaños y…, en fin. No sé si agradecéroslo porque sigue doliéndome mucho.
Y por eso no me atrevo a pediros nada en ese sentido. Sé que no me querrá nunca porque nunca me quiso.
Que le vaya muy bien. Que les vaya muy bien.
Como siempre: paz para el mundo. Algo tan utópico como eso.
Salud para los míos, tanto física como mental.
Tenéis un par de panetones en la cocina, unas tabletas de turrón (dulce de leche y mazapán con frutas), una botella pequeña de cava, leche de vaca y bebida de soja, zumo de kiwi. También hay queso en la nevera. Y, por supuesto, zanahorias, calabacín y repollo para los camellos, alguna manzana y mandarinas. Y todo el agua que quieran beber, que es lo bueno de vivir en Madrid: nos bebemos el agua de grifo.
Espero, queridos Reyes Magos, haber sido lo suficientemente buena como para merecer lo que os pido.
Vuestra:
bruxana (o A.S.T.)Queridos Reyes Magos,
Sí, este año también escribo mi casi tradicional 'carta de Reyes'. Porque, aunque cada vez escriba menos por aquí y hasta en esto de escribir esta carta haya esperado a ultimísima hora…no podía dejar de hacerlo.
Quizá por mera superstición.
Queridos Reyes Magos,
Creo que este año he vuelto a ser bastante buena. He cumplido con mis obligaciones, no he faltado al trabajo, sigo siendo educada, respetuosa y paciente. Procuro no enfadarme (y, si me enfado, no pagarlo con otros y/o que no se me note). También he procurado tener mi entorno doméstico limpio y, hasta donde me permite el tiempo, ordenado. Cuido mis plantas, lanzo trocitos de pan a los pajaritos del jardín. O sea: que he sido todo lo buena que he podido. Y por eso me atrevo a escribiros esta carta.
En realidad, este año lo hago para daros las gracias. Mi principal deseo hace un año justo era que me renovasen el alquiler y a un precio razonable. Y os lo pedí…y me lo concedísteis. O intercedísteis (con otras fuerzas y otras energías) para que así fuese. Así que: infinitas gracias.
También he mantenido el trabajo. El sueldo es de mera supervivencia…pero al menos ya vuelvo a tener cotizado lo bastante como para que, si me despiden, tener nuevamente derecho a unas semanas de subsidio hasta encontrar otra cosa. No es, para nada, el trabajo de mi vida. Pero es lo que hay. Y como en el caso de mi deseo de renovación del alquiler, mi agradecimiento hacia vosotros en lo que vuestra magia haya podido influir.
Y para este año…, pues pocos deseos.
Si acaso, que me ayudéis a encontrar un trabajo con mejor horario, un sueldo más alto y en algo que me ilusione. Estoy entrando en una edad en que va a tener que importarme mucho la base de cotización con vistas a la jubilación. Eso y tener un sueldo que me permita ahorrar algo. Por tanto y a riesgo de resultar tremendamente materialista: os pido que me ayudéis a ganar más dinero en el trabajo (ya sabéis que a mí nunca me asustó trabajar).
Os pido también salud. Y me gustaría no estar, de forma continua, tan cansada. Imagino que para eso también deberé poner de mi parte..
Otro deseo es que no se me rompan más cosas, que termine cuanto antes la obra de la fachada del edificio (porque mis plantas no llevan bien el confinamiento, como no lo llevé yo en su día), no pasar por otro proceso de avería doméstica como el de hace unos meses.
Poco más. La verdad es que no quiero cosas materiales. Me gustaría una nueva cámara de fotos, sobre todo para recuperar las ganas de hacer fotografías. Pero es algo que no puedo pretender tener mañana mismo (ninguna de las dos cosas) así que lo dejaré para que surja a lo largo del año.
Mañana fingiré sorprenderme con los pendientes de metal, el anillo 'nudo de brujas' y el ejemplar de 'El retrato de Dorian Gray' con ilustraciones de B.Lacombe que encontraré junto a mi botín de piel roja.
Y… Y no sé si agradeceros el que este año abriera del todo los ojos y viera tan claramente todas las mentiras, los engaños y…, en fin. No sé si agradecéroslo porque sigue doliéndome mucho.
Y por eso no me atrevo a pediros nada en ese sentido. Sé que no me querrá nunca porque nunca me quiso.
Que le vaya muy bien. Que les vaya muy bien.
Como siempre: paz para el mundo. Algo tan utópico como eso.
Salud para los míos, tanto física como mental.
Tenéis un par de panetones en la cocina, unas tabletas de turrón (dulce de leche y mazapán con frutas), una botella pequeña de cava, leche de vaca y bebida de soja, zumo de kiwi. También hay queso en la nevera. Y, por supuesto, zanahorias, calabacín y repollo para los camellos, alguna manzana y mandarinas. Y todo el agua que quieran beber, que es lo bueno de vivir en Madrid: nos bebemos el agua de grifo.
Espero, queridos Reyes Magos, haber sido lo suficientemente buena como para merecer lo que os pido.
Vuestra:
bruxana (o A.S.T.)
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